lunes, 20 de agosto de 2012

Los peligros del populismo se acrecentan con Rajoy...X Josepe


"Rajoy cree que los problemas no se resuelven pero se disuelven con paciencia”.
Con esta sentencia comienza la columna de opinión que dos catedráticos españoles liberales, dedican a Rajoy en el diario británico Financial Times. Continúan diciendo que  durante décadas, Mariano Rajoy ha triunfado en política con la estrategia de dejar pasar el tiempo. Pero ahora esa máxima aplicada a la profunda crisis tiene resultados catastróficos.  

No se entiende que la actitud de Rajoy les cause sorpresa, sólo hay que recordar su comportamiento en la crisis del Prestige, donde primero convirtió el fuel en un ladrillo en el fondo del mar, luego ante la evidencia de su fuga lo convirtió en plastilina y al final se calló… y hasta hoy.


En su opinión, su estrategia de esperar a que pase algo no nos lleva a ninguna parte. Rajoy primero retrasó seis meses el anuncio de los presupuestos 2012 y ahora espera a que el Banco Central Europeo (BCE) defina el papel que va a jugar en el futuro. Mientras, se olvida de las reformas clave que le exige la Unión Europea y el estado de los bancos y de las comunidades autónomas se deteriora aún más..

El artículo se hace eco del avance de la recesión, la falta de crédito y la caída en picado de la valoración del líder del PP en las últimas encuestas. Las medidas de austeridad puestas en marcha por Rajoy se quedan sin apoyo, ya que los votantes son incapaces de distinguir, por falta de explicación, entre recortes presupuestarios y reformas estructurales.

La crisis económica está dando paso a una crisis constitucional sin precedentes, ya que algunas Comunidades Autónomas empiezan a plantear seriamente la opción de la independencia.

El “demasiado grande para caer” al que en un momento se agarró Rajoy para declarar que si cae España cae el Euro, ya no convence. Está táctica chulesca de intimidación, ya fue practicada por el PP en el islote Perejil, pero  Europa y el BCE no son Marruecos.

Si la salida del Euro no es una opción, lo único que nos queda es un serio programa de crecimiento combinado con una austeridad selectiva en el gasto. Para Rajoy eso tiene un problema, es la política con la que el socialista Françoise Hollande  ha ganado las elecciones en Francia.

La austeridad  no se deben aplicar en lo que afecte al crecimiento, ni se debe recortar en derechos fundamentales sin antes haber aplicado una eliminación de gastos superfluos. Hay que aumentar los ingresos. elaborando un plan creíble de consolidación fiscal justo y que se centre en objetivos a medio plazo, en lugar de objetivos arbitrarios a corto plazo.


3 comentarios:

  1. ¡Si es que tenemos lo que nos merecemos!
    Últimamente le enmienda la plana hasta Mayor Oreja

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  2. Hay que decir a favor de Rajoy que no es nada fácil lidiar ccn mucha de la gente que está en su Partido.

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  3. La suerte del pais queda en manos de los votantes de Euskadi y Galicia. Si el PP no recibe un fuerte varapalo en estas dos CCAA. La que nos espera después del 21 de octubre va a ser de traca.

    Animo a los vascos y gallegos a que castiguen la política del PP con determinación, para que relexione Rajoy

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